Para fanáticos del DIM: Putéelos a gusto, compañero

Futbol Colombiano/PODEROSO DIM
La Unidad de Archivos y Documentación de La Monserga del Fútbol desenterró ésta foto del Libro Negro de los Eternos y Largos 45 Años.

Esta histórica imagen corresponde al DIM del 89. Lo singular de esta foto es que junto a próceres como Oscar Pareja y Carlos Castro (semi-prócer, en realidad, aunque su gol al rival de patio en la final del 93 casi nos hace campeones) se dejan ver los funestos personajes que a continuación reseñaré:

Carlos "el Pipe" Uribe: La vez que más he puteado a jugador alguno en un partido de fútbol (sea en vivo o en TV) fue a este intrascendente delantero en los cuartos de final de la Libertadores del 94 contra Junior en el Atanasio. Estábamos perdiendo 1-0, y el equipo era una tromba buscando el empate (que nos clasificaba). A 10 minutos del final, Rubén Darío Hernández por la diagonal manda el pase de la muerte por el área chica, el balón encontró en la raya el Pipe Uribe…el cual, totalmente sólo frente al arco, se le ocurre (tal vez pensando en completar el sueño de su vida), poner el talón para meterla de taquito. Pero al muy hijo de puta, como era el Pipe y no el Pibe, SE LE PASÓ EL BALÓN EN MEDIO DE LAS PIERNAS Y SE COMIÓ EL GOL…Nadie lo podía creer en el estadio (muchos celebramos el gol antes de tiempo). Lo que hice con toda mi alma en ese trágico momento fue putearlo, reputearlo y recontra putearlo hasta la doceava generación de su ascendencia.

Darío "El Chusco" Sierra: Ah! El famoso Chusco… blanco preferido de los hinchas del rival de patio, que se solazaban burlándose de nosotros con este muchacho, buen tipo pero más pecho frío e intrascendente que Wbeimar Villegas. Era de esos manes que NUNCA metía un pase gol, JAMÁS se echaba el equipo al hombro, y SIEMPRE cuando el equipo iba perdiendo contribuía al desconcierto general. Por eso NADIE le tenía fé cuando lo metían a la cancha, por lo que generaba el consabido “¡Aj!” o “¡Ehj!” de desesperación cuando perdía el balón, o pifiaba el tiro, o la pasaba a un compañero de la zaga… Duró nosecuantos años en el Poderoso, pero se me hicieron como 20 minutos (20 minutos bajo el agua).

Alejandro García: Una de las tantísimas mentiras de la prensa antioqueña de los 90. No debía medir más de metro y medio, pero se hizo delantero, me supongo que de pura terquedad. Usted pensará: “Ah, era pequeñín, o sea que debía ser rápido y habilidoso”. Fíjese que no. Sin embargo, para infortunio del DIM, este esmirriado jugador se echó un par de goles de cabeza en dos o tres juegos seguidos, por lo que se armó la consabida bulla de “Es pequeño, ¡¡¡¡pero tiene una habilidad para cabecear!!!!” promovida por Guillermo Montoya Callejas, Santi Martínez, el Tato Sanín y otros especimenes similares. Resultados: 1) Le colocaron el remoquete de “El Saltarín”. 2) Lo pusieron en la titular por varios partidos seguidos. 3) No volvió a oler la red. Después fue al Envigado y me imagino que terminó su carrera en el Industrial Itagüí, Deportivo Antoquia, Bello o Rionegro de la Primera B.

Danobis Muñoz: De la misma camada de Carlos Castro, pero también del Pipe Uribe…No hace falta explayarnos más...

Andrés Cadavid: Eterna promesa para el arco del Poderoso. Le decían “El Ciego”, porque no veía de noche. Calentó banca de casi todo arquero del Poderoso desde Hernán Torres hasta Juan Carlos Bogado...eso lo dice todo.

Por favor, Dios Mío, que esos tiempos no vuelvan más…