lunes, agosto 27, 2012

Una queja airada y una reflexión

Admitamos que uno como hincha tiende a ser más subjetivo que un comunicado oficial de Hugo Ch*vez, pero hay veces que el poder omnímodo de la razón está con uno. Es que por primera vez en eones los hinchas del DIM vamos al estadio no pensando "Ejjj, maluco no acompañar al equipo en éstos momentos de mierda", sino "Vamos a ganar hoy papáaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa", y nos toca ver como nos pegan un robo descarado no visto en Colombia desde que Teddy Roosevelt se llevó a Panamá. Tanta impotencia (como estado de ánimo, aclaro (?)) no me dejaba escribir sin rezumar resentimiento por cada bit: por eso lo hago ahora que puedo decir objetivamente con toda calma que hay que matarlos a todos (?).

Pero antes, una reflexión: ¿Qué carajo motiva a un tipo a ser árbitro?

Creo que el 99.9649% de nosotros soñamos alguna vez ser futbolistas profesionales. Jugar por el equipo de uno, celebrarle un título en la cara a los odiados rivales, ganar la Libertadores siendo uno figura y goleador, dar el salto a Europa, salir uno en el PES o en el FIFA 2012, celebrar una Champions en una discoteca top de Milan rodeado por unas eufóricas Katy Perry y Heidi Klum, que aprovechan la oscuridad para tocarte la entrepierna. O se conformará uno con jugar en el equipo de uno, celebrarle un título en la cara a los odiados rivales, jugar la Libertadores, salir en Futbolman*a, sacar pasaporte, celebrar un título cualquiera en algún rumbeadero del Parque Lleras rodeado por Yessica Tatiana y Yulanis Paola, que aprovechan la oscuridad para pedirte plata. Cosas así son parte de los sueños de todo aficionado al fútbol, sea uno un crack al que los técnicos le están haciendo cuentas para sacar su porcentaje en el pase, o un tronco treintañero sin redención al que escogen de último en los picados.

Por eso nos preguntamos qué putas motiva a un tipo a convertirse en árbitro. O sea: imaginémonos qué habrá en la cabeza de esos seres andróginos (?) que se encargan de que los partidos no se les vayan de las manos (efectividad 29.87%): tienes 12 años, estás en la edad más impresionable; te gusta el fútbol y cuando sales a jugar con tus amigos peleas ser delantero (si eres malo indefectiblemente te mandan al arco), y en acción te sientes Messi o Ronaldo o o Ribery o Falcao o Felipe Pardo (?). ¿Y un futuro árbitro qué? Sale y dice "Hey, parceros, ustedes repártanse que yo me quedo en lo mío, impartiendo justicia". ¿Sueña ese pelao con Oscar Julián Ruiz (epa), con Imer Machado, con Wilmar Roldán? ¿Manda enlaces en FB de tipo"dale LIKE si quieres que el juez Wilson Lamoroux del  Meta baya al Mundial"? ¿Discute con los amigos cosas como "Nah, fútbol era el de antes, cuando arbitraba Pierluigi Collina?". En serio preguntamos. De pronto entre ustedes habrá alguien con vocación de árbitro, al que le pedimos que comparta con todos qué diablos le pasa (?).

Y peor: ¿qué pasa por la mente de alguien que se dedica a ser Árbitro Asistente? Eso sí es más indefinido que Walter Mercado: ni es uno el que se divierte mandando a todos, ni el que se divierte jugando. ¿Qué le pedirá un futuro Árbitro Asistente al Niño Dios? ¿Un banderín? ¿Serán los Asistentes unos punteros frustrados? ¿Cómo será la escena del Árbitro Asistente cuando llega a la casa y lo saluda la mujer?

- Que hubo, mijo, ¿cómo le fue en el trabajo?
- Bien, mi amor (Beso en la mejilla). Hoy me tocó voleíto: cinco fueras de lugar me tocó señalar. Gutiérrez me miró tres veces y me hizo caso en dos.
- ¡Oiga, mijo, pero lo están poniendo a trabajar mucho ultimamente!
- Sí, pero, bueno, a uno lo buscan porque sabe trabajar en lo de uno...

Si es que se casa, porque imagínate uno levantando una pelada en un rumbeadero, la frase "Sí, soy árbitro asistente por el Colegio Arbitral de Fuerzas Armadas"... desvanece la posibilidad de coger más rápido que un mal aliento...

Bueno, ahora sí, la queja:
La Queja: ¡manos arriba!

1. El partido: el pasado viernes 24 de Agosto en Medellín nos dimos cita como 20,000 almas en una lluviosa noche en el Atanasio Girardot. No pedíamos mucho: solamente que el DIM arrasase hasta los cimientos a ese rejuntado de entre veteranos convencidos de jugar seis meses más antes de retirarse + pelaos aún con acné, llamado Atlético Huila. Si, estábamos esperanzados a pesar de tener de titular a Luis Tipton, ¡imagínate cómo anda la hinchada de ilusionada!. El juego se dió dentro de la tónica esperada: el DIM atacando de menos a más hasta el final del partido, el Huila defendiéndose con uñas, dientes, huevas, patadas y oraciones al Altísimo. Nosotros nos comimos varios goles, ellos pegaron el culo contra su arquero. Nosotros encima, ellos pariendo.

2. La marrullería del Huila ("...un cerrado esquema táctico" mis bolas): pronto comenzó a ocurrir con creciente frecuencia un hecho curioso: vez que el DIM generaba una oportunidad de gol, vez que un jugador del Huila se tiraba al piso alegando alguna dolencia. O sea, no es que el jugador sufría algun contacto que explicase un golpe involuntario: simplemente, como el prestigio del partido Liberal, se caía solo sin que nadie le metiera la mano. Convengamos en que existe la posibilidad que en el club opita se esté alimentando mal a los muchachos: uno aguantando hambre y con stress (generado por, por decir algo, un centro al área) se desmaya. Pero que va, creemos que lo más probable es que sea la marrullería propia de un equipo de mierda dirigido por un técnico de mierda, cagón y rácano, que ni siquiera viene a defenderse (cosa muy respetable cuando uno va de visitante) sino a que pasen rápido los 90 minutos.

3. El árbitro hijueputa (?): Ahí es cuando debe intervenir el árbitro, y ponerle huevas para que el partido fluya. Y eso no fue lo que hizo el muchacho imberbe que mandaron desde Bogotá, con menos personalidad que los papeles que le dan a William H. Macy. Al Huila lo único que le faltó fué pedir time-out de 100 segundos como en basketball. Y el pusilánime éste se los hubiera dado, con bonus de 20 segundos, si no hubiera sentido tan latente ese ambiente de empalamiento-al-juez a lo ancho y largo de las tribunas el Atanasio. Cada saque de arco se convertía en un espectáculo más sobrecargado de gestos que una comedia de Jim Carrey: el arquero huilense tomaba aire, agitaba los brazos ampulosamente (?), daba pasos de ballet, se devolvía, llamaba por su nombre a cada uno de los compañeros, cuerpo técnico y directivos para darles indicaciones, volvía a tomar aire, y ahí sí: revoleaba el balón al carajo. El Karoll Márquez hecho árbitro se limitó a sacar una amarilla, no más.

"...si... ehhh...sí?... es decir.... ehhhh.... ¿Qué hago?... a ver qué me manda a decir don Álvaro..."
Pero lo peor estaba por venir, y dejemos que un barrabrava que estuvo con nosotros en el estadio lo explique mejor: "PARXEROX AXI NO XE PUEDE EXTOX GONORREAX NOX KIEREN XACAR A PNTA DE PITO A LO BN KE CHIMBADA NOX ROBARON UN PENAL MALPARIDOZ KOMO NO BIO EXA MANO ESE PIROBO KE ATRAKO NEA". Más claro, imposible (?).

Ésta mano se la comió el juez, todita, hasta el hombro, por el píloro
¡Se comió esa mano! Iba a pitar el penal, el enano del asistente de Oriental lo puso a dudar, reculó, se le llenó el culo de preguntas varias. Finalmente, y después de tener más dudas que el caso de Luis Colmenares, decidió dar un balón a tierra (!!!), y que siga el partido. En ese momento el estadio veía todo rojo, y pedía por la cabeza del juez e invasión a la planta de Postobón en Bello. Afortunadamente, la violencia se canalizó toda a través de coros masivos con cuestionamientos a la moralidad sexual de la señora madre del árbitro.

Quisimos investigar el prontuario (?) del juez en cuestión, que responde al nombre de Nicolás Gallo Barragán, también conocido como "Árbitro Ladrón Hijueputa". Resulta que es manizalita, tiene veintitantos años y, según lo que dice aquí, es estudiante de Administración de Empresas. Dice en ese link: "A futuro, Nicolás se proyecta como un administrador honesto y responsable, caracterizado por el juego limpio, acorde con los valores impartidos por sus docentes en la Universidad y en su carrera...". Por eso la educación de éste país está como está. Pero la ha cagado otras veces, parece, según lo que él mismo comenta como si nada:

"Jajajaja, una vez amonesté dos veces a un man y no lo expulsé... jaja, qué plato" (?)

martes, agosto 14, 2012

Colombia y su desigual (?) relación con la Copa América - Vol III (reloaded) - Aquí somos pobres pero honrados (?)

Nota aclaratoria: en la pasada Copa América el Politburó decidió sacar uno de nuestros tradicionales "Libros de Peltre", exaltando los valores por los que pelearon Bolívar, San Martín, O´Higgins y Jorge Wilstermann (?). De dicho "Libro de Peltre de la Copa América" salieron solamente dos volumenes, el I (con una reseña de las mascotas del torneo) y el II (con la historia de las participaciones colombianas en tan vetusto torneo, hasta 1975). Por múltiples razones, entre las que se pueden mencionar el capitalismo internacional y la presión de la burguesía emergente por acumular bienes, no seguimos la serie. Desde esos días hemos recibido cartas anónimas, emails amenazantes y hasta (Dios mío, protégenos) suscripciones a TV y Novelas, todo por cuenta de no haber completado las reseñas. Por lo tanto, y como una reivindicación histórica ante la deuda adquirida ante esos tres desocupados que nos leen, continuamos con éste post la reseña de las participaciones colombianas en las Copa América. Eh, nos dicen por el interno que quedamos mal con la Euro también. Puta, otra deuda histórica...

Copa América 1979, sin sede fija. Campeón Paraguay.

Selección Base de Colombia: Pedro Zape - Fernando "El Pecoso" Castro, Miguel Escobar, Luis Eduardo Reyes, Oscar Bolaño - Hernán Darío Herrera, Álvaro Muñoz Castro, Gabriel Chaparro, Freddy Valverde - Ernesto Díaz (Jaime Morón), Arnoldo Iguarán (Didí Valderrama), Willington Ortiz.

...veníamos de hacer una eliminatoria parejita, parejita (contra Paraguay y Brasil, dos partidos perdidos de visitante - dos partidos empatados de locales. Bueno, de locales no, en El Campín (?)). El DT que cumplió tan destacada labor fué el yugoslavo (levante la mano el que no sepa qué era Yugoslavia...) Blagoje Vidinic, tradicional coach de cuanta selección colombiana hubiere por esas fechas. Para esa Copa no teníamos taaaaaaaaaaaaaaan mala nómina: empezando por el grandísimo Willington Ortiz, Pedro Antonio Zape,  el entonces joven Arnoldo Iguarán, Didí Valderrama, Ernesto Díaz y otros. Una mezcla entre la experiencia de los viejos con el empuje de los nuevos.

El aún-no-viejo Willie. Un prócer como jugador. Un gran (?) como DT.  Como actor una risa, pero es Al Pacino comparado con los de los realities de RCN.

Lástima que al final, la experiencia vino de los jóvenes y el empuje de los viejos. Iniciamos empatando con la horrible Venezuela en San Cristóbal, y seguidamente le ganamos en un accidentado partido (que incluyó agresión del tierno "Pecoso" Castro al DT chileno Luis Santibáñez) a Chile en Bogotá. Como Chile también empató en Venezuela todo se reducía a ver quién le metía más goles a los petroleros en casa: nosotros les hicimos 4 (Iguarán, Valverde, Chaparro y Jaime Morón) y los Sísmicos les empacaron 7, lo que reducía el asunto a que si nos ganaban los chilenos en Santiago pasaban ellos por gol diferencia.


O sea: Chile tenía que ganarnos en Santiago. Y, adivinen, efectivamente eso pasó. 2-0 nos metieron, y con esa derrota se fué Vidinic a dirigir no sé dónde, y nosotros otra vez a preguntarnos qué pasó, porqué volvimos a fracasar, hay que sacarlos a todos. Al final la Copa la ganó Paraguay, que le ganó el grupo a Ecuador y Uruguay, y luego dió el batacazo en las semifinales eliminando a Brasil, y por último a Chile en la final en triple partido. En ese equipo se destacó Alicio Solalinde (con ese nombre, decir que era paraguayo es un pleonasmo de la gran puta: tiene pintado el Defensores del Chaco en la cédula), y también glorias como Roberto "El Gato" Fernández, Evaristo Isasi y Carlos Kiese. Una copita de mierda (?).
El Paraguay que hizo historia en 1979, con el patrocinio de Yerba Mate Ñaquricuary
Copa América 1983, sin sede fija. Campeón Uruguay

Nómina base: James Mina Camacho - Oscar Bolaños, Miguel Augusto Prince (Norberto Molina), Henry Viáfara, Víctor Luna - Ernesto Díaz (Norberto Peluffo), Hernán Darío Herrera, Pedro Sarmiento, Juan Caicedo - Fernando Fiorillo (Jesús "El Kiko" Barrios (!!!!!)), Arnoldo Iguarán (Didí Valderrama).

Veníamos de hacer el gran oso mundial de renunciar a organizar el Ídem en el 86. Veníamos de quedar eliminados del de España 82 haciendo un papel más pobre que basquetbolista boliviano. En el torneo comenzaba la supremacía del América multiultratriplemega defensivo del profe Gabriel Ochoa. Teníamos de presidente a Belisario. Con éste background (?) no se podía aspirar más que a ver qué mierda podía hacer el fútbol nacional para no dar demasiada pena en el torneo continental. En el que otra vez se jugó con una fase previa de grupos, de la cual pasaba el ganador de cada uno a enfrentarse en las semis contra el ganador de la edición anterior. Y a nosotros nos tocó un grupo relax, contra una Bolivia que en esa época daba pena a nivel orbital, a diferencia de ahora que, eh...sigamos.... y un Perú en proceso de encontrarse a sí mismo (?) después de un paupérrimo Mundial en España un año atrás.


El Uruguay campeón de 1983 (histórica foto: no estaba Fernando Alvez (?))

Nuestra selección tenía de base la misma de la Copa América pasada, con alguna reliquia de pre-guerra, como Ernesto Díaz. Y si hablamos de reliquias, no dejemos de mencionar al glorioso Caimán Sánchez, que fué el DT del equipo en el torneo. Además el refuerzo de muchos jóvenes que fueron la columna vertebral de tantos éxitos del fútbol colombiano en los 80 (?): Víctor Luna, Pedro Sarmiento, Norberto Peluffo, Hernán Darío Herrera (veterano de la copa anterior) o Miguel "El Nano" Prince, que no era el Maldini criollo pero te evacuaba hasta a los Marines . Y además el pintoresco portero de Padilla (Cauca) James Mina Camacho y el "Kiko" Barrios (apuesto que muchos no sabían que jugó con la selección), que no sé si aportaban en calidad pero sí en sabrosura. Y arrancamos bien, ganándole a Bolivia en La Paz por primera vez en 45 años, con gol del Didí Valderrama. Pero luego perdimos en Lima con gol de Franco Navarro, aunque como los peruanos empataron después de visitante, teníamos la ventaja aún.

El instante exacto en el que el gran Franco Navarro, rodeado por 4 defensores (!!!) le mete el gol a James Mina Camacho, en Lima. Los chaperones que posaron para la foto son Oscar Bolaño, "El Polaco" Escobar, Norberto Molina y Juan Caicedo.  

...ventaja que (otra vez) desperdiciamos. Ésta vez empatando 2-2 dos veces en un Campín repleto, una ante Perú (íbamos 2-1, nos empataron faltando 5 minutos) y la otra ante Bolivia (ibamos 2-0 faltando 15 minutos...bue). Pasó Perú, que después fué eliminado por una renovada Uruguay que lucía perlitas como Enzo Francéscoli, Wilmar Cabrera, Rodolfo Rodríguez, Carlos Diogo, Carlos "El Pato" Aguilera... Y eso que en la primera ronda al goleador histórico Fernando Morena le zampó terrible entrada un defensor venezolano que le partió tibia y peroné. A Morena no le quedó más remedio que dejar el puesto, por ese enojoso asunto de la tibia y el peroné fracturado... El caso es que se encontró con Brasil en la final, que después de 2 empates había pasado por una moneda contra Paraguay (!!!). Quedó campeón Uruguay, por el equipo que tenía y por haberse encontrado en la final a Brasil.


Copa América 1987, en Argentina. Campeón Uruguay.

Nómina Base: René Higuita - "El Chonto" Herrera, Luis Carlos Perea, Norberto Molina, Carlos Mario Hoyos - Leonel Alvarez, Ricardo "El Chicho" Pérez (Mario Coll), Bernardo Redín, Carlos "El Pibe" Valderrama, Juan Jairo Galeano, Arnoldo Iguarán

...Y viene el torneo que oficialmente, señala el inicio de la época dorada de nuestro fútbol. Ese periodo en el que nuestro fútbol tuvo mucho brillo pero no ganó nada. Corregimos: la época niquelada. Seamos más realistas: desde éste torneo nuestro fútbol dejó de ser a ojos de todos, ese relleno de cuarta que a veces le jodía la vida a alguno, para convertirse en ese candidato que le dañana el caminado a los grandes pero se caía antes de tiempo. Ese año la selección fué con algo de esperanza por la imagen que dejó el combinado que participó en el Preolímpico de Abril en Bolivia, en el que mostramos un fútbol de alto vuelo, mucha clase, mucho fútbol y, éste, eh...no clasificamos a los Olímpicos... El DT de esa selección, reconfirmado para la Copa América fué un tal Francisco "Pacho" Maturana (no sé si lo han oído mentar), que tuvo el buen criterio de llevarse a lo mejorcito que teníamos en ambas competencias que le tocó dirigir.

El Pibe sacándose al arquero paraguayo (nacionalizado boliviano) Galarza en el 2-0 de la primera fase

Para el torneo de Argentina se comenzó a escribir la gloriosa historia de algunos nuevos o que ya habían jugado sin mucha bulla en la selección: René Higuita, Leonel Álvarez, "El Pibe" Valderrama. Se confirmó la clase del veterano de guerra Arnoldo "El Guajiro" Iguarán. Se le dió cabida a varios puntales secundarios de los años venideros: Luis Carlos Perea, Bernardo Redín. Y empezó la leyenda del carril fantasma, ese que tenía un jugador que vendía mucho humo y que se desaparecía en los momentos más onoportunos . Sí Chonto Herrera, te estamos mirando (?). Nos tocó un grupo ganable: la siempre triste Bolivia (a la que le ganamos 2-0) y un Paraguay confuso, que tenía que ganarnos para pasar de ronda pero lo matamos en el Festival-del-Guajiro: la fiesta del contragolpe. Pasamos a la semifinal, en la que nos tocó la sorprendente Chile (que le había clavado un humillante 4-0 a los brasileños), pero jugamos con un miedo terrible y perdimos 2-1 en el tiempo suplementario.

Quedaba el consuelo del Tercer Puesto, ese que para los grandes es como salir de farra con la prima porque lo dejó plantado la novia, y para los países chicos es como motelear con Amparo Grisales: no es lo que uno buscaba pero se obtiene prestigio (?). Nos tocó la Argentina del hiperkinético Carlos Bilardo, que de local hizo un torneo horrible que incluyó eliminada en semifinal contra Uruguay. En un partido pasado por la niebla, les ganamos 2-1 con goles de J.J. Galeano (!!) y Barrabás Gómez (!!!!!!!!).
La nómina que ganó el tercer puesto a los odiados (?) argentinos: Bernardo Redín, Leonel Álvarez, Luis Carlos Perea, Carlos Mario Hoyos, Norberto Molina, René Higuita. Abajo, Mario Coll, Barrabás Gómez, Chonto Herrera, J.J. Galeano, el grandísimo Carlos Alberto Valderrama Palacios. (Fuente La Redó!)
Continuará proximamente (jijiji (?))


martes, agosto 07, 2012

El fútbol de Colombia en los Juegos Olímpicos: una historia llena de Medallas de Peltre

Por éstos días estamos todos insuflados del fuego inmarcesible de los Juegos Olímpicos, y eso nos lleva a actuar en concordancia de diversas maneras: hay unos que se sienten con más mística que Filípides en la batalla de Marathon (esa en donde los atenienses celebraron una victoria ante los persas fundando una marca de ropa deportiva ecuatoriana), y por eso se ven desde el tiro al jabalí hasta las competencias de caballos, sin entender un carajo pero aplaudiendo a todos (menos a los yankis). Muchos otros, imbuídos de un marcial y fogoso espíritu olímpico, harán especial énfasis en las competencias donde estén las voleybolistas rusas, las basquetbolistas polacas o las futbolistas suecas. Nosotros los del Politburó sentimos un poquito de todo lo anterior junto, pero además le añadimos un particular desinterés por el fútbol olímpico.

Sí, nos interesa muy poco el fútbol en éstos Olímpicos, ese coso que no se sabe bien cómo es:
  • Ni es amateur 100%, ni es profesional 100%.
  • Los equipos participantes son sub 23 + 3 viejorros, pero la eliminatoria al torneo es en una competencia sub 20 (!). 
  • Es el único deporte de los olímpicos al que no van todos los mejores de tu país
  • Es la única competencia de fútbol en el planeta donde vemos a ese insaboro rejuntado llamado GB Team. Imagínate el vestuario: un galés se esforzará en abrazar a sus camaradas ingleses, mientras dentro de sí verá un leprechaun vestido de rojo y verde chillándole "¡AY QUE MATAR AL INGLÉS! ¡AY QUE MATAR AL INGLEEÉS!".
  • Los partidos están en el fondo teñidos de un espíritu edulcorado que hace que la posibilidad de una tángana sea tan lejana como la que un atleta admita en rueda de prensa "Sí, je, en la Villa Olímpica pasamos cogiendo todos con todas...".
Pero en LMDF no queremos menospreciar - ni mucho menos -  a un deporte que le ha dado tanta gloria olímpica al país (?): recorreremos la breve historia del fútbol colombiano en los Juegos Olímpicos.

Primera Participación: México 1968

Antes de 1960 la clasificación a los Olímpicos se hacía a través de los Juegos Panamericanos. Para los Juegos de Roma 1960 el Comité Olímpico Internacional aglutinó a las selecciones americanas (10 inscritas en total) en 5 llaves de las cuales avanzaban a una ronda final los ganadores. Dice mucho de nuestra tradicional sal que, estando disponibles Antillas Holandesas o Surinam, nos tocó pareja contra Brasil, que luego de un inesperado 2-0 en Bogotá a favor nuestro, se rebotó y nos empacó un 7-1 en el Maracaná. Chao Roma. Para Tokio 1964 ya la Conmebol tomó cartas en el asunto (me imagino a un ya octogenario Nicolás Leoz haciendo planes de dominación continental desde su tenebroso cuartel de Asunción) y logró que las selecciones sudamericanas disputaran el cupo entre ellas mismas. El torneo, jugado en Lima, nos vió a nosotros participando dignamente. Traducción: quedamos eliminados, y Chao Tokio.

Para 1968 la Conmebol designó a Bogotá como sede del Preolímpico, y eso era un papayazo que teníamos que aprovechar (la localía, la altura, el calor del público bogotano... jijiji (?)). Nuestra selección estaba dirigida por un señor llamado Edgar Barona, reliquia histórica de los tiempos de la Colonia que logró clasificar a la selección a los juegos de México, en una campaña cuyo único partido perdido fué contra Brasil, precisamente el día en que fué al estadio el presidente Carl*s Ll*ras R*str*p* (?).

El portero Otoniel Quintana, histórico que jugó en esa selección
El equipo que fué a México en vuelo charter que duró apenas 45 horas, estaba constituído por figuras como Otoniel Quintana (el arquero del en esa época poderoso Millonarios), Gustavo Santa (sí, el tío de), Luis Eduardo ‘Camello’ Soto (¿porqué a todos los de apellido Soto los apodan "Camello"? Da para tesis) , Norman ‘Barby’ (????Ah, bue...) Ortiz, Javier ‘El Toro’ Tamayo, el después histórico y eterno defensor del Junior Gabriel Berdugo, Darío López, Alfredo Arango y Ramiro Viáfara. Un equipo rendidorcito, que le tocó en el grupo con el local, Francia y Guinea. Pero nos fué mal: perdimos contra los locales en el debut 1-0 y luego contra Guinea 3-2 (los goles nuestros de Santa y de Mosquera), y quedamos fuera. Para el honor quedó la victoria en la última fecha contra la ya clasificada Francia 2-1, que se sumó a nuestra atiborrada vitrina de triunfos morales.

La selección Preolímpica del 68 en un amistoso previo, con algunos cambios de los que quedaron en el torneo. No sabemos quién es el primer jugador arriba a la izquierda, pero si jugaba de defensa central alguna falencia teníamos por ahí (?) (Fuente)

Segunda Participación: Munich 1972

Otra vez la Diosa Fortuna (¿la Dio$a?) decidió que el torneo Preolímpico para Sudamérica se jugara en Colombia (Bogotá y Cali). Y otra vez lo aprovechamos, clasificando de segundos detrás de Brasil, gracias a un registro impoluto de 0 Ganados - 3 Empatados - 0 Perdidos en la fase final (!!). El equipo tenía como conocidos a Gerardo "El Alemán" Moncada (apodado así no tanto por su inminente viaje a Munich sino por un look que hubiera hecho llenarse el culo de interrogantes a Reynhard Heydrich (?)), el histórico goleador Jaime Morón, un tal Willington Ortiz y el técnico yugoslavo Toza Veselinovic.

La selección que jugó el Preolímpico del 72. Arriba, de Izq a Der: Silvio Quintero, Jaime "El Flaco" Rodríguez, Óscar Ortega, Henry “La Mosca” Caicedo, Gerardo “El Alemán” Moncada y sí, señores: Luis “El $heque” García. Abajo, Jaime Morón, Fabio Espinosa, Álvaro Santamaría, Adolfo “El Rifle” Andrade y Álvaro Contreras. (Fuente)
Recordemos que por esos lejanos días, solo podían competir en los Juegos Olímpicos deportistas aficionados. Y lo mencionamos porque en los países del Bloque Comunista eran cipote de vivos: supuestamente todos los futbolistas de sus ligas trabajaban en entidades del estado, y por ende eran amateur. O sea: en teoría podían convocar a CUALQUIER jugador de sus ligas, y en una época en que la URSS era potencia europea y Yugoslavia, Checoslovaquia, Polonia y Hungría estaban a la par de España o Francia, por ejemplo, era más ventajoso que ser concejal por un municipio de la Costa. Y nosotros, que ni con la selección mayor les hacíamos cosquillas, vimos como el sorteo y la vida cruel nos juntaba en el mismo grupo con la Polonia de Kazimierz Deyna, Grzegorz Lato, Robert Gadocha y Wlodzimierz Lubanski, y con la Alemania Oriental de Jurgen Sparwasser (éste): dos equipos con varias de sus figuras históricas y que iban a ser protagonistas del mundial a jugar dos años después. En el primer partido nos vacunó Polonia con un terrible 5-1 (tres de Gadocha y dos de Deyna, el nuestro lo hizo Jaime Morón) y en en segundo nos terminó de enterrar Alemania Oriental 6-1 (el nuestro lo hizo Espinosa). En el cierre nos tocó con Ghana, y a sea sí la despachamos con un 3-1 con goles del gran Jaime Morón, Angel María Torres y Montaño. Al menos nos vinimos con Diploma Olímpico (?).

Tercera Participación: Moscú 1980

Para Montreal 1976 no clasificamos en el Preolímpico disputado en Recife, Brasil (clasificaron los locales y Uruguay, pero los uruguayos renunciaron a jugar el torneo; su puesto se lo dieron a Cuba). Para 1980 oooooootra vez nos dieron la sede del Preolímpico (algo raro había ahí, digo yo) a jugarse en Bogotá, Cali, Pereira y Barranquilla. La dirección técnica del equipo se la dieron al fogoso, impetuoso, pintoresco pero muy conocedor del fútbol Eduardo Julián Retat, que tomó lo mejor que teníamos en jugadores aficionados: el arquero Carlos "Tribilín" (así le decían, yo qué culpa) Valencia, Fernando Fiorillo, Henry Viáfara, Jorge Porras, Rafael Agudelo, José "El Cheché" Hernández, Pedro Sarmiento, "El Pitillo" Valencia... un buen combo teníamos, la verdad. Por la importancia del torneo, Inravisión decidió pasar todos los partidos en directo (cosa inédita en esos lejanos tiempos), lo que hizo crecer la expectativa entre el público. Esos recuerdos gangosos en Blanco y Negro con selecciones para todos exóticas constituyen parte de mis primeros recuerdos futbolísticos por TV, y se me entremezclan en mi achacosa memoria con el aroma a borrador y lápiz, con Mazinger-Z y con las ganas inocentes e infantiles que le tenía a una tía (?).

Pero a pesar del buen equipo, del técnico y de la localía estuvimos cagando mucha tinta para clasificar: perdimos contra las horribles Bolivia y Venezuela, y en la penúltima fecha teníamos que ganarle sí o sí a Brasil para llegar con aspiraciones de clasificar. Y fué un inesperado y fantástico baile 5-1 a favor nuestro, con 3 goles de Pedro Sarmiento, uno del pereirano Benjamín "Mincho" Cardona y otro de Rafael "Vallenato" Agudelo. Recuerdo aún la euforia que sintió todo el mundo con esa goleada y la posterior clasificación a Moscú; y más patente tengo en la memoria la sensación adquirida que éramos el mejor equipo del mundo. La vida y la realidad se encargaron de darme una bofetada con guantalete de hierro (?). A Moscú llegamos con muchas ilusiones, pero otra vez: chan. En el primer partido nos tocó otro equipo de "aficionados" - Checoslovaquia - que nos clavó un 3-0 contundente. Después empatamos 1-1 con Kuwait (gol del juniorista Carlos Molinares) y le ganamos 1-0 a Nigeria (gol del "Mincho" Cardona). La verdad hicimos un papel digno (puta, otra vez eliminados (?)), pero no nos alcanzó.


Cuarta Participación (y última): el vergonzoso papel Barcelona 92

No me digan que no teníamos equipo para traernos alguna medalla de Barcelona 92. A ver: Miguel Calero, José Fernando Santa, Jorge Bermúdez, Giovanis Cassiani, Diego León Osorio, Herman "Carepa" Gaviria, Harold Lozano, John Wilmar "La Pelusa" Pérez, Victor Danilo Pacheco, Víctor Aristizabal, Omar "La Fiera" Cañas, Iván René Valenciano, Faustino Asprilla, Faryd Camilo Mondragón... Dos palabras: Equi pazo. Y aparte dirigidos por el joven y talentoso (en esa época) Hernán Darío "Bolillo" Gómez ("en esa época" nos referimos a lo joven... espero que no haya perdido lo talentoso (?)), técnico que esperaba dar un golpe (jijiji) con éste equipo. El preolímpico empezó como una noche de rumba y sexo con Angelina Jolie y terminó con la imagen de ella yéndose en taxi sola y uno en la autopista esperando coger un bus bajo la lluvia: la fase inicial fué una fiesta de goles y buen fútbol, que se fué apagando de a poquito hasta la fase final, donde clasificamos de segundos detrás de Paraguay (que había pasado de ronda gracias a que Venezuela le sacó un histórico empate a Brasil).

La generación que tanto nos llenaba de emociones iniciales y de frustraciones finales: Arriba: Miguel Calero, Jorge Bermúdez, Hermann “Carepa” Gaviria, Geovannis Cassiani, Iván René Valenciano y Harold Lozano. Abajo: Faustino Asprilla, John Wilmer “La Pelusa” Pérez, José Fernando Santa, Víctor Hugo Aristizábal, Diego León O$$$orio. (Fuente: Bestiario del Balón)
Ya recordarán todos como era el pensamiento de la masa futbolera por esos días: "...lástima que no no quedamos campeones por algún infortunio al final, pero lo importante era clasificar... tenemos equipo para hacer un buen papel, y, porqué no: ser campeones. Ya es hora que demostremos el fútbol que tenemos, que somos potencia en Sudamérica, que ya no somos la cenicienta... van a ver el equipo que llevamos...". Nos tocó el grupo con los dueños de casa, pero la cosa parecía fácil contra los otros dos (Egipto y Qatar). Todos esperábamos que la selección hiciera un buen partido en el debut contra España, de pronto dar el zarpazo y ganarles, y....

...

Ay Dió: los españoles nos bailaron flamenco y jota: 4-0 nos empacaron. Desde el primer gol, hecho por un muchachito llamado Josep Guardiola, se vió clarito esa actitud tan noventosa nuestra de entrar a la cancha confiados y después ser desbordados por los acontecimientos. Para rematar dimos vergüenza con jugadas como aquella en la que no devolvimos un balón que por Fair Play nos habían pasado los españoles. Bochorno total. Quedaban dos partidos pero al equipo se le notaba el cagazo en las caras: contra Qatar fue un tibio 1-1 (gol de Aristizábal) y contra Egipto fué la deblacle, perdiendo 4-3 después de ir ganando 3-2 de hambre hasta el primer minuto de descuento. El nivel general fué bajísimo: imagínate que al Tino Asprilla lo reemplazó Jairo Calanche Sulbarán (!!). Esa fue una de las varias lechoneadas históricas noventosas que tuvieron nuestras selecciones, pero, lamentablemente, no fue la última.


El Medallista de Oro con el uniforme más feo en 116 años de Olimpismo.
... y para cerrar recordemos que quedamos eliminados de Atlanta 96 (cuartos en un grupo de cinco en Primera Ronda), Sydney 2000 (jugado en Londrina, Brasil... a ver qué partido les recuerda la mención de ésta ciudad) y Atenas 2004 (eliminados en Primera Fase, en ese torneo se vió al goleador del futuro, Sergio Herrera (?)).  Para Beijing 2008 y Londres 2012 se eliminó el torneo preolímpico, siendo reemplazado como sistema clasificatorio el Juventud de América (sub 20). Después del cambio de torneo hemos tenido, en total, esperen yo sumo.... 0 clasificaciones.

Esperemos que para Rio 2016 tengamos algo que contar que no sean las pifias al balón de las Superpoderosas.