martes, agosto 07, 2012

El fútbol de Colombia en los Juegos Olímpicos: una historia llena de Medallas de Peltre

Por éstos días estamos todos insuflados del fuego inmarcesible de los Juegos Olímpicos, y eso nos lleva a actuar en concordancia de diversas maneras: hay unos que se sienten con más mística que Filípides en la batalla de Marathon (esa en donde los atenienses celebraron una victoria ante los persas fundando una marca de ropa deportiva ecuatoriana), y por eso se ven desde el tiro al jabalí hasta las competencias de caballos, sin entender un carajo pero aplaudiendo a todos (menos a los yankis). Muchos otros, imbuídos de un marcial y fogoso espíritu olímpico, harán especial énfasis en las competencias donde estén las voleybolistas rusas, las basquetbolistas polacas o las futbolistas suecas. Nosotros los del Politburó sentimos un poquito de todo lo anterior junto, pero además le añadimos un particular desinterés por el fútbol olímpico.

Sí, nos interesa muy poco el fútbol en éstos Olímpicos, ese coso que no se sabe bien cómo es:
  • Ni es amateur 100%, ni es profesional 100%.
  • Los equipos participantes son sub 23 + 3 viejorros, pero la eliminatoria al torneo es en una competencia sub 20 (!). 
  • Es el único deporte de los olímpicos al que no van todos los mejores de tu país
  • Es la única competencia de fútbol en el planeta donde vemos a ese insaboro rejuntado llamado GB Team. Imagínate el vestuario: un galés se esforzará en abrazar a sus camaradas ingleses, mientras dentro de sí verá un leprechaun vestido de rojo y verde chillándole "¡AY QUE MATAR AL INGLÉS! ¡AY QUE MATAR AL INGLEEÉS!".
  • Los partidos están en el fondo teñidos de un espíritu edulcorado que hace que la posibilidad de una tángana sea tan lejana como la que un atleta admita en rueda de prensa "Sí, je, en la Villa Olímpica pasamos cogiendo todos con todas...".
Pero en LMDF no queremos menospreciar - ni mucho menos -  a un deporte que le ha dado tanta gloria olímpica al país (?): recorreremos la breve historia del fútbol colombiano en los Juegos Olímpicos.

Primera Participación: México 1968

Antes de 1960 la clasificación a los Olímpicos se hacía a través de los Juegos Panamericanos. Para los Juegos de Roma 1960 el Comité Olímpico Internacional aglutinó a las selecciones americanas (10 inscritas en total) en 5 llaves de las cuales avanzaban a una ronda final los ganadores. Dice mucho de nuestra tradicional sal que, estando disponibles Antillas Holandesas o Surinam, nos tocó pareja contra Brasil, que luego de un inesperado 2-0 en Bogotá a favor nuestro, se rebotó y nos empacó un 7-1 en el Maracaná. Chao Roma. Para Tokio 1964 ya la Conmebol tomó cartas en el asunto (me imagino a un ya octogenario Nicolás Leoz haciendo planes de dominación continental desde su tenebroso cuartel de Asunción) y logró que las selecciones sudamericanas disputaran el cupo entre ellas mismas. El torneo, jugado en Lima, nos vió a nosotros participando dignamente. Traducción: quedamos eliminados, y Chao Tokio.

Para 1968 la Conmebol designó a Bogotá como sede del Preolímpico, y eso era un papayazo que teníamos que aprovechar (la localía, la altura, el calor del público bogotano... jijiji (?)). Nuestra selección estaba dirigida por un señor llamado Edgar Barona, reliquia histórica de los tiempos de la Colonia que logró clasificar a la selección a los juegos de México, en una campaña cuyo único partido perdido fué contra Brasil, precisamente el día en que fué al estadio el presidente Carl*s Ll*ras R*str*p* (?).

El portero Otoniel Quintana, histórico que jugó en esa selección
El equipo que fué a México en vuelo charter que duró apenas 45 horas, estaba constituído por figuras como Otoniel Quintana (el arquero del en esa época poderoso Millonarios), Gustavo Santa (sí, el tío de), Luis Eduardo ‘Camello’ Soto (¿porqué a todos los de apellido Soto los apodan "Camello"? Da para tesis) , Norman ‘Barby’ (????Ah, bue...) Ortiz, Javier ‘El Toro’ Tamayo, el después histórico y eterno defensor del Junior Gabriel Berdugo, Darío López, Alfredo Arango y Ramiro Viáfara. Un equipo rendidorcito, que le tocó en el grupo con el local, Francia y Guinea. Pero nos fué mal: perdimos contra los locales en el debut 1-0 y luego contra Guinea 3-2 (los goles nuestros de Santa y de Mosquera), y quedamos fuera. Para el honor quedó la victoria en la última fecha contra la ya clasificada Francia 2-1, que se sumó a nuestra atiborrada vitrina de triunfos morales.

La selección Preolímpica del 68 en un amistoso previo, con algunos cambios de los que quedaron en el torneo. No sabemos quién es el primer jugador arriba a la izquierda, pero si jugaba de defensa central alguna falencia teníamos por ahí (?) (Fuente)

Segunda Participación: Munich 1972

Otra vez la Diosa Fortuna (¿la Dio$a?) decidió que el torneo Preolímpico para Sudamérica se jugara en Colombia (Bogotá y Cali). Y otra vez lo aprovechamos, clasificando de segundos detrás de Brasil, gracias a un registro impoluto de 0 Ganados - 3 Empatados - 0 Perdidos en la fase final (!!). El equipo tenía como conocidos a Gerardo "El Alemán" Moncada (apodado así no tanto por su inminente viaje a Munich sino por un look que hubiera hecho llenarse el culo de interrogantes a Reynhard Heydrich (?)), el histórico goleador Jaime Morón, un tal Willington Ortiz y el técnico yugoslavo Toza Veselinovic.

La selección que jugó el Preolímpico del 72. Arriba, de Izq a Der: Silvio Quintero, Jaime "El Flaco" Rodríguez, Óscar Ortega, Henry “La Mosca” Caicedo, Gerardo “El Alemán” Moncada y sí, señores: Luis “El $heque” García. Abajo, Jaime Morón, Fabio Espinosa, Álvaro Santamaría, Adolfo “El Rifle” Andrade y Álvaro Contreras. (Fuente)
Recordemos que por esos lejanos días, solo podían competir en los Juegos Olímpicos deportistas aficionados. Y lo mencionamos porque en los países del Bloque Comunista eran cipote de vivos: supuestamente todos los futbolistas de sus ligas trabajaban en entidades del estado, y por ende eran amateur. O sea: en teoría podían convocar a CUALQUIER jugador de sus ligas, y en una época en que la URSS era potencia europea y Yugoslavia, Checoslovaquia, Polonia y Hungría estaban a la par de España o Francia, por ejemplo, era más ventajoso que ser concejal por un municipio de la Costa. Y nosotros, que ni con la selección mayor les hacíamos cosquillas, vimos como el sorteo y la vida cruel nos juntaba en el mismo grupo con la Polonia de Kazimierz Deyna, Grzegorz Lato, Robert Gadocha y Wlodzimierz Lubanski, y con la Alemania Oriental de Jurgen Sparwasser (éste): dos equipos con varias de sus figuras históricas y que iban a ser protagonistas del mundial a jugar dos años después. En el primer partido nos vacunó Polonia con un terrible 5-1 (tres de Gadocha y dos de Deyna, el nuestro lo hizo Jaime Morón) y en en segundo nos terminó de enterrar Alemania Oriental 6-1 (el nuestro lo hizo Espinosa). En el cierre nos tocó con Ghana, y a sea sí la despachamos con un 3-1 con goles del gran Jaime Morón, Angel María Torres y Montaño. Al menos nos vinimos con Diploma Olímpico (?).

Tercera Participación: Moscú 1980

Para Montreal 1976 no clasificamos en el Preolímpico disputado en Recife, Brasil (clasificaron los locales y Uruguay, pero los uruguayos renunciaron a jugar el torneo; su puesto se lo dieron a Cuba). Para 1980 oooooootra vez nos dieron la sede del Preolímpico (algo raro había ahí, digo yo) a jugarse en Bogotá, Cali, Pereira y Barranquilla. La dirección técnica del equipo se la dieron al fogoso, impetuoso, pintoresco pero muy conocedor del fútbol Eduardo Julián Retat, que tomó lo mejor que teníamos en jugadores aficionados: el arquero Carlos "Tribilín" (así le decían, yo qué culpa) Valencia, Fernando Fiorillo, Henry Viáfara, Jorge Porras, Rafael Agudelo, José "El Cheché" Hernández, Pedro Sarmiento, "El Pitillo" Valencia... un buen combo teníamos, la verdad. Por la importancia del torneo, Inravisión decidió pasar todos los partidos en directo (cosa inédita en esos lejanos tiempos), lo que hizo crecer la expectativa entre el público. Esos recuerdos gangosos en Blanco y Negro con selecciones para todos exóticas constituyen parte de mis primeros recuerdos futbolísticos por TV, y se me entremezclan en mi achacosa memoria con el aroma a borrador y lápiz, con Mazinger-Z y con las ganas inocentes e infantiles que le tenía a una tía (?).

Pero a pesar del buen equipo, del técnico y de la localía estuvimos cagando mucha tinta para clasificar: perdimos contra las horribles Bolivia y Venezuela, y en la penúltima fecha teníamos que ganarle sí o sí a Brasil para llegar con aspiraciones de clasificar. Y fué un inesperado y fantástico baile 5-1 a favor nuestro, con 3 goles de Pedro Sarmiento, uno del pereirano Benjamín "Mincho" Cardona y otro de Rafael "Vallenato" Agudelo. Recuerdo aún la euforia que sintió todo el mundo con esa goleada y la posterior clasificación a Moscú; y más patente tengo en la memoria la sensación adquirida que éramos el mejor equipo del mundo. La vida y la realidad se encargaron de darme una bofetada con guantalete de hierro (?). A Moscú llegamos con muchas ilusiones, pero otra vez: chan. En el primer partido nos tocó otro equipo de "aficionados" - Checoslovaquia - que nos clavó un 3-0 contundente. Después empatamos 1-1 con Kuwait (gol del juniorista Carlos Molinares) y le ganamos 1-0 a Nigeria (gol del "Mincho" Cardona). La verdad hicimos un papel digno (puta, otra vez eliminados (?)), pero no nos alcanzó.


Cuarta Participación (y última): el vergonzoso papel Barcelona 92

No me digan que no teníamos equipo para traernos alguna medalla de Barcelona 92. A ver: Miguel Calero, José Fernando Santa, Jorge Bermúdez, Giovanis Cassiani, Diego León Osorio, Herman "Carepa" Gaviria, Harold Lozano, John Wilmar "La Pelusa" Pérez, Victor Danilo Pacheco, Víctor Aristizabal, Omar "La Fiera" Cañas, Iván René Valenciano, Faustino Asprilla, Faryd Camilo Mondragón... Dos palabras: Equi pazo. Y aparte dirigidos por el joven y talentoso (en esa época) Hernán Darío "Bolillo" Gómez ("en esa época" nos referimos a lo joven... espero que no haya perdido lo talentoso (?)), técnico que esperaba dar un golpe (jijiji) con éste equipo. El preolímpico empezó como una noche de rumba y sexo con Angelina Jolie y terminó con la imagen de ella yéndose en taxi sola y uno en la autopista esperando coger un bus bajo la lluvia: la fase inicial fué una fiesta de goles y buen fútbol, que se fué apagando de a poquito hasta la fase final, donde clasificamos de segundos detrás de Paraguay (que había pasado de ronda gracias a que Venezuela le sacó un histórico empate a Brasil).

La generación que tanto nos llenaba de emociones iniciales y de frustraciones finales: Arriba: Miguel Calero, Jorge Bermúdez, Hermann “Carepa” Gaviria, Geovannis Cassiani, Iván René Valenciano y Harold Lozano. Abajo: Faustino Asprilla, John Wilmer “La Pelusa” Pérez, José Fernando Santa, Víctor Hugo Aristizábal, Diego León O$$$orio. (Fuente: Bestiario del Balón)
Ya recordarán todos como era el pensamiento de la masa futbolera por esos días: "...lástima que no no quedamos campeones por algún infortunio al final, pero lo importante era clasificar... tenemos equipo para hacer un buen papel, y, porqué no: ser campeones. Ya es hora que demostremos el fútbol que tenemos, que somos potencia en Sudamérica, que ya no somos la cenicienta... van a ver el equipo que llevamos...". Nos tocó el grupo con los dueños de casa, pero la cosa parecía fácil contra los otros dos (Egipto y Qatar). Todos esperábamos que la selección hiciera un buen partido en el debut contra España, de pronto dar el zarpazo y ganarles, y....

...

Ay Dió: los españoles nos bailaron flamenco y jota: 4-0 nos empacaron. Desde el primer gol, hecho por un muchachito llamado Josep Guardiola, se vió clarito esa actitud tan noventosa nuestra de entrar a la cancha confiados y después ser desbordados por los acontecimientos. Para rematar dimos vergüenza con jugadas como aquella en la que no devolvimos un balón que por Fair Play nos habían pasado los españoles. Bochorno total. Quedaban dos partidos pero al equipo se le notaba el cagazo en las caras: contra Qatar fue un tibio 1-1 (gol de Aristizábal) y contra Egipto fué la deblacle, perdiendo 4-3 después de ir ganando 3-2 de hambre hasta el primer minuto de descuento. El nivel general fué bajísimo: imagínate que al Tino Asprilla lo reemplazó Jairo Calanche Sulbarán (!!). Esa fue una de las varias lechoneadas históricas noventosas que tuvieron nuestras selecciones, pero, lamentablemente, no fue la última.


El Medallista de Oro con el uniforme más feo en 116 años de Olimpismo.
... y para cerrar recordemos que quedamos eliminados de Atlanta 96 (cuartos en un grupo de cinco en Primera Ronda), Sydney 2000 (jugado en Londrina, Brasil... a ver qué partido les recuerda la mención de ésta ciudad) y Atenas 2004 (eliminados en Primera Fase, en ese torneo se vió al goleador del futuro, Sergio Herrera (?)).  Para Beijing 2008 y Londres 2012 se eliminó el torneo preolímpico, siendo reemplazado como sistema clasificatorio el Juventud de América (sub 20). Después del cambio de torneo hemos tenido, en total, esperen yo sumo.... 0 clasificaciones.

Esperemos que para Rio 2016 tengamos algo que contar que no sean las pifias al balón de las Superpoderosas.

13 comentarios:

  1. Yo vivía en Barranquilla cuando ocurrieron esos juegos en Barcelona. Recuerdo haber leido una crónica de Fabio Poveda Márquez (QEPD) en la que decía que Asprilla se dedicó fue a mamar gallo y a eyacular en la villa olímpica. Nada mas queria decir eso. Excelente artículo como siempre, maestro.

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  2. Esas lechoneadas noventeras, me hicieron despertar viejos fantasmas del pasado. A proposito la reina de las lechoneadas: el mundial USA 94, ha estado capando post en la monserga hace raaato

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  3. Si no recuerdo mal, a Valenciano medio lo expulsaron injustamente contra España arrancando el partido, y le dieron dos fechas, no jugó más.

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    1. No recuerdo si fue tan injustamente la expulsión, pero hubo llantén.

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  4. Corrección: Gustavo Santa es el tío de José Fernando Santa, no el papá

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    1. Muchas gracias por la corrección. Ahí lo editaremos.

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  5. Corrección: Gustavo Santa es el tío de José Fernando Santa, no el papá

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  6. La masacre de Londrina!!, que viejos recuerdos, recién empezaba mi primer año Universitario...

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  7. Me van a caer a puteadas los cientos de participantes de este blog. Pero Calero, a nivel de selecciom, que limitado que fue siempre. Un arquero muy del monton, imcluso para olvidar.

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    1. A mí no me pareció la gran cosa, tampoco el horror absoluto. Se recuerda más por su estilo casi rococó (?) para sacar de arco.

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  8. Si no me equivoco a Calero le cobran un indirecto adentro del área por tomar con las manos un pase atrás, regla que se puso a prueba justamente en los JJ.OO. y de ahí viene el primer gol.

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  9. Pensar que en 2000 los chilenos ya tenían pasaje de vuelta antes del Brasil-Colombia y terminaron sacando medalla de bronce en Sidney: eliminaron a Argentina en el preolímpico y en los propios juegos llegaron más lejos que Brasil.

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  10. Si, estoy de acuerdo. Calero fue tremendamente inflado. Quedo bien en Mejico, apenas el futbol para el. Ni siquiera en Brasil o Argentina tapo, mucho menos pensar en Europa. Ahora no faltara el que me diga que jugo Mundial de Clubes, blah, blah, blah.... tremende petardete, inflado tanto o mas que Rene o el mejicano Campos.

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