Cuando uno se mete a bloggero de deportes, no sabe en lo que se está metiendo. Puede que no se sepa porque en realidad uno no se mete a nada. ¿O sí? Ojo que no hablo de aquellas personas que se dedican en cuerpo y alma a crear, actualizar y mantener un blog o sitio web de fútbol con fines de periodismo y/o comerciales: hablo de aquellos que agradecemos los adelantos tecnológicos que han permitido que cualquier huevón como uno escribe cualquier huevada cada vez que el estudio/trabajo se lo permite, o entre paja y paja (?), la cual puede ser leída (en teoría) por millones de personas.
Yo llevo ya 4 años en ésto, sacándole tiempo a pedazos a ésta labor que empieza generalmente como una mamadera de gallo, y termina convirtiéndose en, eh... una mamadera de gallo, jejeje, no jodamos. Pero he conocido gente muy bacana e inteligente, incluso hasta siendo hinchas de Nacional (???), a través de los blogs. He visto escribir posts brillantes y casi gloriosos a gente que uno, si la viera en la calle, la juzgaría como incapaz hasta de tomarse una Coca Cola sin que se le derrame por la nariz. He visto blogs que empiezan con tanto impulso como el que le entraría uno a Shakira si la tuviera en bola en el cuarto de uno diciendo "Soy tuya, papi, hazme el Waka-waka", y a los 3 meses están más quedados que la carrera de Johnier Montaño. He visto las profundidades del averno y las delicías del Edén (???). Así que me tomé la libertad de emular a Reiner Maria Rilke (no, no es el que era puntero derecho de Borussia Dortmund en los 80, sino éste) y escribir éste epistolario, o más bien, postario (bueh), con reflexiones variadas del mundo (?) Blogger, de esa actividad inoficiosa que uno hace y que lo conlleva a escribir 4 horas seguidas de habladera de mierda sin que le deje la sensación a uno que perdió el tiempo.
Yo llevo ya 4 años en ésto, sacándole tiempo a pedazos a ésta labor que empieza generalmente como una mamadera de gallo, y termina convirtiéndose en, eh... una mamadera de gallo, jejeje, no jodamos. Pero he conocido gente muy bacana e inteligente, incluso hasta siendo hinchas de Nacional (???), a través de los blogs. He visto escribir posts brillantes y casi gloriosos a gente que uno, si la viera en la calle, la juzgaría como incapaz hasta de tomarse una Coca Cola sin que se le derrame por la nariz. He visto blogs que empiezan con tanto impulso como el que le entraría uno a Shakira si la tuviera en bola en el cuarto de uno diciendo "Soy tuya, papi, hazme el Waka-waka", y a los 3 meses están más quedados que la carrera de Johnier Montaño. He visto las profundidades del averno y las delicías del Edén (???). Así que me tomé la libertad de emular a Reiner Maria Rilke (no, no es el que era puntero derecho de Borussia Dortmund en los 80, sino éste) y escribir éste epistolario, o más bien, postario (bueh), con reflexiones variadas del mundo (?) Blogger, de esa actividad inoficiosa que uno hace y que lo conlleva a escribir 4 horas seguidas de habladera de mierda sin que le deje la sensación a uno que perdió el tiempo.
Advertencia: ¡Ojo, putitos!
O sea: NO esperen consejos: no soy quién para pontificar acerca de nada. Aparte que para eso tengo menos autoridad moral que Andr*s P*str*na para hablar de lo mal que está el país, mis consejos son como un discurso de Pacho Maturana: rimbombantes e inefectivos. Me limitaré a transmitir mis vivencias (?) en el tema, que empezaron desde la época en que la mayoría de ustedes descubría los sentidos ocultos de su cuerpo (?). Si con eso no le basta y espera una solución al enredo en que se metió al comenzar un blog, se jodió.
Reflexión 1. Ser blogger no es lo mismo que ser escritor, nononono.
Para nada. Uno comienza con ínfulas de escritor, escribe cualquier texto elaborado que uno considera que sólo le falta ser firmado por ese maestro del arte de las letras llamado Gabriel Meluk (?) para ser publicado en un medio nacional, o hasta internacional. Después se asombra que nadie lo haya leído, o al menos, comentado. Pero se tranquiliza diciendo que su post vale su peso en Kb en oro. Al tiempo lo vuelve a leer y se da cuenta que en realidad escribió un bodrio más denso y sobrecargado que el volumen de juego de la selección Colombia de Pinto. Ya es tarde para corregirlo, pero temprano para darse cuenta de lo mucho que falta para pulirse. Con el tiempo te darás cuenta que te estás más pulido que cagada de sapo (?????), pero eso no es lo importante, sino el hecho de asumir que uno puede saber más o menos escribir, pero cuando uno escribe un post no está un Redactor corrigiéndote para taparte las cagadas. Así que puedes salir con algo como "Hoy el VERDE REY DE KOPAS ganó a Ramerica en el chiquero, jajajaja hijos nuestros son hijos nuestros seran, aguante el rey del mundo" y estás seguro que se publica, porque un blog tiene menos filtro que la oficina de contratacion de la Alcaldía de Bogotá.Recomendación: escribir para pasarla bacano, que si sale algo bueno es un plus. Si sale algo que no se lee ni la mamá de uno para darle moral, al menos consuélese que está haciendo una actividad que lo distrae, diferente de hacerse la paja (?).
2. Hacer un blog no es el primer puntal para ser millonario (?)
Todos tenemos metas en la vida, tan sencillas como aspirar a tener la plata suficiente como para poder desayunarse todos los días unos omelettes con salsa de moras silvestres servidos sobre las níveas tetas de tus dos asistentes personales suecas. Pero para que eso pase tienen que conjugarse una serie triple matricial de eventos más complicado que aprender japonés a punta de fotocopias. Muy maluco uno empezar desde los 15 años con el blog, y a los 30 años viviendo aún con los papás y prometiéndoles "Viejos, tranquilos que éste año despega el blog y nos llenamos de-pla-ta ". Y tu mamá pensando "Ay, mijito, tan ilusionado el pobrecito". Y tu papá pensando "Si, gran marica: éste año el que despega eres tú, pero de la casa". Je (?).Ahora: cosa muy diferente es (como dijimos al principio) pensar en vivir de tu blog y estar dedicado 100% (o casi) a él. Ahí sí, si sabes escribir y le pegas a lo que le gusta la gente, te puede ir bien. Eso sí, no esperes que tu sueño de sacar a la calle un picotazo con vallenatos de Diomedes Díaz o música de Darío Gómez en tu casa de Malibú o Marbella sea producto de escribir un post de "JAIRO PATIÑO HIJUEPUTA" cada 2 semanas.
Recomendación: No esperes el cheque de Adsense: pónte a camellar. Sí, a tí te hablo, gran marica (?).
3. El número de comentarios es relativo.
A veces la vida (?) te pone pruebas como la de ver como te zampas 3 semanas seguidas, buscando información bibliográfica acerca del módulo táctico utilizado por el Tottenham Hostpur de 1922-1923, te haces un cipote de post y te comentan 3 personas. O escribes un post con menos trabajo que las Coristas de Iván y sus Bam Band, y al día siguiente ves como tienes 85 comentarios.La calidad de lo que escribes no va en el número de gente que te comenta: muy bacano que le comenten a uno un post. Pero si quieres ver muchos comentarios en un post tuyo, invéntate uno en donde hagas de pelada de 16-20 años y lo llames "¡Hoy es el día más maravilloso del resto de mi vida!". Si no te haces 30 comentarios por post (claro, todos los buitres en plan de levante) me hago monje cristiano maronita en el Alto Timbuktú.
Recomendación: Si vas a inventar un blog donde hagas de pelada de 16-20 años, me avisas para no caer como un marica...
4. Levantar peladas apelando a tu blog no es sabio (?)
A ver: puede que tener un blog de fútbol te parezca cool (?) pero el círculo en que eso se considere como tal es muy restringido. Y hay pocas peladas. Y las que hay, son sometidas a un machacante y constante asedio por parte de los varones, del cual generalmente la pelada se escapa consiguiéndose un novio barra brava que no distingue la Z de la X. Si es el caso usted puede que sea de uno de éstos dos grupos: 1) de los manes que levantan peladas a punta de parla y paciencia para escucharles las sandeces que hablan (?), y 2) de los manes que en su vida sólo se han levantado a la prima cuando jugaban al papá y a la mamá a los 6 años, y a la bagre del barrio, una noche en que estaba borracha y dándolo por un abrazo. Si usted es del segundo grupo, tenga en cuenta seriamente que ésto de los blogs NO es atractivo para las damas en general. O sea, depende del entorno: si tú estás en una rumba con las conocidas de las amigas de los amigos, el entablar conversación con la pelinegra de al lado en medio de la bulla y la media luz con "Te cuento que tengo un blog de fútbol, se llama "El Hincha es Pasión" y es taaaan charro! Imaginate que en éstos días hice un post burlándome de Cristiano Ronaldo, ese putito, je, y me comentaron 2 personas. Ve, y... ¿Te gusta el fútbol?"... garantizo que lo único que pondrás esa noche será 5,000 pesos para la carrera de tu amigo que te los pidió prestados para motelear con la pelinegra.
Recomendación: Salga. Tenga una vida. La PC es adictiva, esa hija de puta (?), pero no reemplaza una salida, el contacto, la toqueteadera, el levante físico con bluyineada (??) incluída.
Por todo lo anterior: ¿vale la pena tener un blog de fútbol? No sé: es cuestión de ver si se puede medir en términos de "vale la pena". Si uno quiere escribir, qué carajo, hay que escribir. Si uno no tiene la facilidad para escribir, mejor no hacerlo. Es cuestión de desdramatizar el asunto, disfrutarlo y vivir las cosas como se den. A menos que sea uno hincha de Santa Fé, con lo que el tema de "disfrutar" queda en las mejores intenciones...
Excelente post Maestro, casi me caigo de la cama por reirme con: 'Muy maluco uno empezar desde los 15 años con el blog, y a los 30 años viviendo aún con los papás y prometiéndoles "Viejos, tranquilos que éste año despega el blog y nos llenamos de-pla-ta"'.
ResponderBorrarMuy buenos puntos de vista y ante todo veraces, un blog debe tener un interés que perdura, de lo contrario pasa lo mismo que sucedió con un FPCH por ahí(?)
Grande Maestro, voy ya mismito a crearle competencia(?) para llenarme de plata, de mujeres y fama así como usted(?). Jeje, muchas risas me hizo sacar esta mañana.
ResponderBorrarlO mEjOr d ezzthe block ez ke no ezkrive la jente azhiii.
Noto cierta crisis existencial en el post, a que se debe este discurso paternal??. Me suena como cuando uno le decia al papá " papi papi, cuando sea grande tambien quiero ser camionero como tu"(es solo un ejemplo, tambien pueden usar, policia, traqueto, cargabultos, extra de TV, etc...) a lo que el padre con frustracion e ira le responde a su hijo "carajo, no diga pendejadas, me estoy moliendo el lomo pa que usted estudie y no le toque tan duro como me toco a mi".
ResponderBorrarImpecable como siempre Don YSEC. Y me disculpo si soy repetitivo con mis elogios. Una sola cosita, corregir el Reiner del ilustre poeta. Y seguir así ome! Que esto le alegra mucho el rato a uno!
ResponderBorrarQue un blogger no es un escritor? Don YSEC, en su caso es la rosca de los medios nacionales la que se perdió de un gran colaborador. Ya quisiera más de un Meluk (este, mejor sin tener que citar nombres) escribir lo que publica Usted.
ResponderBorrarEste blog siempre es una parada (???) obligatoria para mí en la web.
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderBorrarEX-CE-LEN-TE Post Don Carlos!
ResponderBorrarapoyo el comentario de Dr. Sipmac
Yo siempre leo este blog, pero nunca comento. Siempre es muy bueno y acertado. Le tengo la solución para que en vez de que este blog se escriba entre paja y paja, y se escriba y/o se lea mientras la paja, hay que hacer una alianza estrategica con pornhub.com, youporn.com o en últimas con Soho, donde sus modelos lean el blog mientras se embolan, el problema es enseñarles a leer a esas niñas.
ResponderBorrarmuy buena entrada don YSEC, totalmente de acuerdo en todas sus apreciaciones...
ResponderBorrarPor cierto... cuando armamos LR! criolla para taparnos de-pla-ta? (?)
Graciela por los comentarios. No, no estoy en crisis existencial. Simplemente me volví viejo (?????).
ResponderBorrarImpecable, YSEC, como siempre. Un saludo
ResponderBorrarMuy cierto Ysec.Yo al iniciar en el chuzo que tengo, pensaba siempre "Y si a la gente no le gusta"?... Ya he dejado eso atrás y publico cuánta huevonada se me ocurre. También adhiero al comentario de Sipmac, todo blogger es un escritor en potencia, no tan experto, pero escritor a fin de cuentas.
ResponderBorrarBuen post maestro...es grato el regreso, pero no olvidemos una semblanza de la copa America o del mundialito...dame fulbol!!!
ResponderBorraradelante monserga!!!
ResponderBorrarYo estoy deacuerdo con Huesos master. Algo de pornito no le caeria mal a su página. Pienselo. (Y lo digo en serio)
ResponderBorrarA ver, pensaré lo del porno en LMDF.
ResponderBorrar...
...
...
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Naaaah, qué porno! Stop touchin´ yourselves, go touch some pussy (?)
Ah, lo de la Copa América, ya estoy preparando algo del tema para antes del inicio de tan magno evento.
ResponderBorrarJajajaja excelente como siempre hermano. Una risa su "instantanea"
ResponderBorrarYa ve por qué le dice uno "maestro", maestro?
ResponderBorrarBenedicto XVI deberia escribir sobre futbol:
ResponderBorrarSi se hojean los periódicos y se escuchan los programas de radio, se comprobará rápidamente que hay un tema dominante: el fútbol y el campeonato de fútbol. Este deporte se ha convertido en un acontecimiento universal que une a los hombres de todo el orbe, por encima de fronteras nacionales, en un mismo estado de ánimo, en idénticas esperanzas, miedos, pasiones y alegrías. Todo ello pone de manifiesto que se debe estar tocando algo originariamente humano.
De ahí que surja naturalmente la pregunta acerca de dónde reside el poder de este juego. El pesimista dirá que es la misma situación de la antigua Roma: panem et circenses (pan y circo). Ahora bien, incluso si se acepta esta interpretación, debería hacerse una nueva pregunta: ¿a qué se debe la fascinación de este juego, que se pone, con idéntica importancia, al lado del pan? Con la mirada puesta nuevamente en la antigua Roma, se podría responder a ese interrogante diciendo que el grito reclamando pan y juego fue propiamente la expresión del anhelo de la vida paradisíaca. En este sentido, el juego sería, pues, una especie de vuelta al hogar en el paraíso: huir del rigor esclavizador de lo cotidiano.
Ahora bien, el juego tiene, sobre todo en los niños, un carácter distinto: es ejercicio para la vida.
A mi juicio, la fascinación del fútbol consiste esencialmente en unir de modo convincente los dos aspectos referidos. El fútbol obliga al hombre ante todo a disciplinarse a sí mismo.
También le enseña a colaborar con los demás y, por último, a enfrentarse con ellos limpiamente. Al contemplarlo, los hombres se identifican con el juego, participando de ese modo en la colaboración y la pugna referidas. La seriedad sombría del dinero y del espíritu mercantilista pueden, naturalmente, echarlo todo a perder. Al pensar detenidamente en estas cosas, tal vez sea posible aprender nuevamente a vivir a partir del juego: la libertad del hombre se nutre de reglas y de disciplina. El fenómeno de un mundo que vibra con el juego podría darnos más que entretenimiento. Si fuéramos al fondo, el juego podría proporcionarnos una forma de vida